SEDO advierte de que una mala salud bucal afecta al bienestar general y a la calidad de vida
La Sociedad Española de Ortodoncia y Ortopedia Dentofacial (SEDO) alerta de que algunas dolencias como los dientes sensibles, caries sin tratar, encías sangrantes o piezas bucodentales que se mueven pueden derivar en enfermedades cardiovasculares, metabólicas o problemas durante el embarazo
Algunas enfermedades cardiovasculares, metabólicas e incluso algunos problemas durante el embarazo tienen que ver con una mala salud bucodental. La premisa está avalada por la evidencia científica y, por eso, la Sociedad Española de Ortodoncia y Ortopedia Dentofacial (SEDO) quiere poner el acento del Día Mundial de la Salud en la importancia de cuidar nuestras bocas. No en vano, el 56% de los españoles manifiesta tener algún problema bucodental. No tratar esas dolencias “puede derivar en otras enfermedades sistémicas, como enfermedades pulmonares o renales, riesgo de infarto del miocardio o dificultades en el control de la diabetes”, alertan.
En este sentido, la SEDO destaca también el papel que juega en la salud budodental y, por ende, en la salud general, la colocación si fuera necesario de una ortodoncia. “Unos dientes mal alineados dificultan la higiene dental, favoreciendo la proliferación de bacterias y la aparición de problemas en las encías, como gingivitis y enfermedad periodontal”, subrayan. De ahí que la ortodoncia, mediante el alineamiento de los dientes, contribuya a la salud de las encías. De hecho, afirman, “los pacientes tratados por problemas periodontales, una vez curados, y tras someterse a un tratamiento de ortodoncia que coloque correctamente sus dientes, mejoran su pronóstico a largo plazo y obtienen un gran beneficio estético para su sonrisa y su salud”.
De otro lado, los dientes sensibles, caries sin tratar, encías sangrantes, piezas dentales que se mueven o dolor al abrir o cerrar la boca son los principales problemas que presenta la salud bucodental en términos generales. Tal como recuerdan desde la SEDO, cuidar nuestra boca no sólo pone freno a los problemas evidentes en los dientes, sino que incluso minimiza el riesgo de sufrir cáncer oral. Por eso desde el colectivo se incide en que “es fundamental seguir hábitos de higiene oral adecuados, como cepillarse tres veces al día con una pasta fluorada, usar seda dental y un buen colutorio.” Asimismo, aconseja “evitar todo tipo de hábitos nocivos, como fumar o ingerir alimentos azucarados antes de ir a dormir”. Y, como tarea inevitable, acudir al dentista periódicamente y en caso de detectar alguna lesión que no mejora después de dos semanas.
La salud general, pues, comienza en la boca, y la educación para evitar dolencias futuras empieza en la infancia. La SEDO, aprovechando este Día Mundial de la Salud lanza un mensaje especialmente dirigido a los menores para que estos se conciencien de la necesidad de incorporar hábitos de higiene bucodental desde la infancia para el cuidado y el mantenimiento de su salud general en la edad adulta.
